El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es un trastorno de ansiedad en el que los pacientes experimentan patrones de pensamiento repetitivos que generan angustia. El psicólogo Pedro Neira de la Clínica López Ibor comenta para un artículo de Infosalus que se estima que entre el 2% y el 10% de la población podría verse afectada por este trastorno, con una edad promedio de inicio de 20 años. El TOC puede manifestarse de diferentes formas y puede ser desencadenado o exacerbado por situaciones estresantes, como la pandemia.
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Algunos signos que pueden indicar la presencia de TOC incluyen intentar contrarrestar los pensamientos obsesivos mediante actos compulsivos que, a largo plazo, aumentan la angustia. Las compulsiones pueden variar desde lavarse las manos repetidamente por miedo a la contaminación hasta realizar repeticiones de palabras con la creencia mágica de evitar desastres.
Para identificar y manejar el TOC, se sugiere racionalizar lo que sucede, proporcionarse argumentos tranquilizadores y evitar el exceso de información. Es importante participar en actividades de ocio y fortalecer los vínculos interpersonales para distraerse de los pensamientos negativos.
Si bien no hay una causa exacta para el TOC, se cree que puede tener una base genética y estar relacionado con desequilibrios en la neurotransmisión de la serotonina. Factores culturales, ambientales, infecciones previas, traumas, consumo de sustancias y otros trastornos mentales también pueden influir en su desarrollo.
El contenido de las obsesiones y compulsiones varía de una persona a otra, pero las más comunes suelen estar relacionadas con la contaminación, la necesidad de orden y simetría, impulsos agresivos o miedos catastróficos. El TOC puede afectar significativamente la calidad de vida de los pacientes, consumiendo tiempo y esfuerzo en sus rituales.
Es importante tener en cuenta que no todas las personas obsesivas o meticulosas padecen TOC. El diagnóstico puede retrasarse, pero es fundamental para comprender el problema y brindar ayuda. El tratamiento del TOC puede incluir psicoeducación, psicoterapia, medicación o una combinación de estas opciones. La recuperación es posible con un diagnóstico precoz y un cumplimiento adecuado del tratamiento.
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