El texto destaca la importancia de un enfoque multidisciplinario en la salud, fusionando tecnología y humanismo, según Fernando Bandrés, presidente de la Fundación Tecnología y Salud. La colaboración entre Fenin y la Fundación Ortega-Marañón busca integrar la industria tecnológica sanitaria con el ámbito académico, promoviendo conocimiento y valorando la tecnología sanitaria.
La formación inaugurada aborda temas como robótica, digitalización, chat GPT, ingeniería biomédica, y medicina de precisión, reflexionando sobre su impacto en la salud del siglo XXI. Lucía Sala, directora general de la Fundación Ortega-Marañón, enfatiza la creación de equipos multidisciplinares para mejorar diagnósticos y optimizar recursos, mientras se plantean cuestiones sobre el futuro del profesional sanitario.
Se discute la creciente feminización en la sanidad y los desafíos que enfrenta, como la falta de representación femenina en roles de liderazgo y la necesidad de especialización. Inés López-Ibor, catedrática de Psiquiatría, resalta la importancia de combinar aspectos racionales y humanos en la medicina.
El foro también destaca el rol creciente de los ingenieros biomédicos, quienes colaboran estrechamente con profesionales sanitarios en el desarrollo de tecnologías médicas. Enrique Gómez, presidente de la Sociedad Española de Ingeniería Biomédica, subraya la necesidad de ingenieros creativos y bien formados en disciplinas médicas.
Finalmente, Ana Pastor y Eduardo Díaz-Rubio cierran la jornada, enfocándose en la necesidad de formación continua para los profesionales sanitarios ante los avances tecnológicos y demográficos, y abordando desafíos como la atención a pacientes crónicos y la coordinación sociosanitaria.
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